Impuestos y otras ventajas de residir en Dubai
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Emiratos Árabes Unidos es uno de los prominentes centros financieros del golfo conocido por sus altos rascacielos, su aeropuerto internacional y su nula tributación.

Durante la última década ha seducido a miles de nuevos residentes que han decido trasladarse allí atraídos por los nulos impuestos directos y las facilidades que ofrecen las «free trade zones».

Desde Relocate&Save hemos gestionado muchos cambios de residencia y redomiciliaciones a Emiratos Árabes Unidos, donde sin duda el destino más solicitado es Dubái y sus «free trade zones».

En esta guía dremos una visión general sobre qué impuestos se pagan en Dubái y sobre el proceso de obtención de residencia.

¿Para quién es recomendable Dubái?

Centenares de nómadas digitales, millonarios, deportistas e inversores están estableciendo su residencia en Dubái para pagar menos impuestos y disfrutar de un ambiente internacional festivo y distendido.

Es especialmente reseñable el caso de los grandes propietarios de criptomonedas, ya que Dubái eximió de impuestos a las criptomonedas en sus zonas francas en septiembre del 2021.

Dubái es un destino especialmente atractivo para gente joven con perfil internacional ya que, a diferencia de Andorra o Suiza, Dubái tiene una gran oferta de ocio y un aeropuerto internacional que conecta prácticamente con todos los lugares del mundo.

Generalmente los nuevos residentes se instalan y emprenden sus negocios en las llamadas «free trade zones» de Dubái.

¿Qué es una «free trade zone»?

No es algo muy conocido, pero en la mayoría de Emiratos Árabes Unidos existen normas que limitan la inversión extranjera.

Esto implica que los inversores no nacionales no pueden tener más de un 49% de las acciones de una empresa ni adquirir propiedad.

Sin embargo, el porcentaje puede ser incrementado a un 100% en las empresas registradas en una de las más de 40 «free trade zones» existentes en los Emiratos.

Las principales ventajas de las «free trade zones» son:

  1. Exenciones fiscales de 15 a 50 años (renovables).
  2. Ausencia de restricciones a la propiedad extranjera.
  3. Ausencia de restricciones a la repatriación de capitales y beneficios, y exención de los derechos de importación de las mercancías introducidas en las zonas.
  4. Más libertades civiles, sobre todo en Dubái (alcohol, fiestas en discotecas, Tinder).

De este modo, estas zonas tienen un régimen especial de impuestos y regulación, principalmente con intención de favorecer la inversión extranjera.

Las más conocidas son Abu Dabhi Global Market (ADGM) y Dubai Multi Commodities Centre (DMCC). Esta última es una de las más antiguas del país.

Hoy nos centraremos en Dubái y sus «free trade zones», una de las ciudades más cosmopolitas del mundo en la cual el mundo musulmán convive con normalidad con las costumbres de los extranjeros.

Además es un excelente hub para conectar con el continente asiático gracias a su red de convenios y buenas relaciones con la India.

¿Qué «free trade zone» escoger en Dubái?

La «free trade zone» de International Free Zone Authority (IFZA) es una de las más reconocidas internacionalmente y una de las más baratas de Dubái.

Asimismo, los requisitos exigidos por la IFZA también son de los menos exigentes de todos lo Emiratos.

En la IFZA puedes hacer trámites de apertura de sociedad online, tener administradores no residentes y abrir una cuenta bancaria de manera ágil.

No obstante, desde Relocate&Save queremos remarcar los riesgos existentes en la IFZA, donde existen asesores de bajo coste que no cumplen muchos de los requisitos exigidos por la autoridad financiera emiratí.

Esto puede implicar graves problemas como el bloqueo de cuentas bancarias, por lo que siempre recomendamos proceder con profesionales de reputada experiencia.

El principal atractivo de estas free trade zones es a su vez la apertura al extranjero y la nula o baja fiscalidad.

¿Qué impuestos se pagan en Dubái?

Dubái se caracteriza por la ausencia total de impuestos directos y la presencia de un impuesto indirecto limitado. No obstante, sí que existe un sistema impositivo latente que explicaremos a continuación.

Impuesto sobre sociedades

En Emiratos solo se pagan impuestos en determinadas industrias.

Los tipos impositivos son los siguientes:

  1. Tipo progresivo de hasta el 55% para las empresas de petróleo y gas.
  2. Tipo de hasta el 20% para las sucursales bancarias extranjeras.
  3. Ausencia de impuestos 0% para el resto de empresas e industrias.

De este modo, el impuesto sobre sociedades en Dubái será generalmente de un 0%.

Para poder disfrutar de la ausencia total de impuestos y poder declarar frente a haciendas extranjeras que su sociedad es de Dubái, es necesario la obtención de un certificado de residencia fiscal.

A pesar de que la legislación emiratí no tiene artículos respecto a la residencia fiscal de las empresas, el Ministerio de Finanzas emite certificados de residencia fiscal bajo ciertas circunstancias.

Generalmente lo que solicitan es que la sociedad se haya constituido de acuerdo con las leyes de Emiratos, tenga su domicilio en dicho país y tenga administradores residentes.

Requisitos de substancia económica para sociedades

Mucha gente se plantea la posibilidad de constituir empresas offshore sin medios humanos ni materiales en Dubái para no pagar impuestos.

No obstante, desde abril de 2019 se han establecido unos requisitos mínimos de sustancia económica para sociedades que realizan actividades consideradas relevantes.

Generalmente se considera actividades relevantes las dedicadas al sector del gas y petróleo, crédito, finanzas y holdings entre otras.

Estas normas de sustancia implican que se deba cumplir con las siguientes tres pruebas de sustancia económica:

  1. La sociedad debe ser dirigida y gestionada en Dubái (reuniones del consejo de administración en Dubái);
  2. La sociedad debe demostrar que se han llevado a cabo actividades generadoras de ingresos básicos en Dubái;
  3. La empresa debe tener un número adecuado de empleados cualificados en Dubái, tener una oficina (o coworking) e incurrir en gastos en Dubái.

En este sentido, a la pregunta de «¿puedo tener una empresa en Dubái para no pagar impuestos y vivir en otro país?», en la medida que esta no tenga dirección efectiva y sustancia económica en Dubái, la respuesta es no.

Impuestos sobre las persona físicas

En Dubái no existe Impuesto sobre las Personas Físicas ni ley que lo regule, en consecuencia el individuo que resida en Dubái no pagará impuestos por sus ganancias personales.

Al no existir ley, no existe un concepto de residencia fiscal, por lo que hasta hace poco el Ministerio de hacienda Emiratí no emitía certificados de residencia fiscal.

Este hecho implicaba que quien se mudara allí no podía probar su residencia fiscal, ya que el único certificado que se otorga es el de nacionalidad.

Afortunadamente, el Ministerio de Hacienda ya expide certificados de residencia fiscal a las personas físicas que puedan demostrar que han residido más de 183 días en Dubái durante un año fiscal.

Otros impuestos: bienes inmuebles e IVA

En Dubái sí que existe carga impositiva sobre bienes inmuebles a través de una tasa municipal del 5% sobre el valor anual del alquiler de la propiedad residencial.

Adicionalmente existe un impuestos indirecto o IVA incipiente desde enero de 2018 del 5% para algunos bienes consumibles.

Más ventajas impositivas en Dubái

En Dubái tampoco existe un impuesto sobre sucesiones ni donaciones ni impuesto sobre el patrimonio.

Emiratos ha firmado 88 tratados para evitar la doble imposición y ha firmado el instrumento Multilateral, por lo que Dubái es una gran plaza financiera desde la cual coordinar sus negocios.

Ante este marco impositivo tan atractivo, muchos nómadas digitales, deportistas y HNWI han decidió trasladar su residencia a Dubái.

¿Cómo conseguir la residencia en Dubái?

Obtener una residencia en Dubái es bastante sencillo. Para ello existen tres maneras diferentes para residir en Dubái:

  1. Como trabajador. Se puede obtener la residencia en Dubái si se cuenta con el patrocinio de un empleador, el cual se renueva cada tres años.
  2. Mediante la compra de bienes inmuebles. Con una inversión mínima de 275.000 dólares  en Dubái.
  3. Mediante la constitución de una empresa en una «free trade zone» de Dubái.

¿Cómo dar el primer paso?

Desde Relocate&Save hemos ayudado durante estos últimos años a trasladar la residencia fiscal a Dubái de emprendedores, grandes patrimonios, deportistas y gente del mundo de las criptomonedas.

De hecho, nuestra presencia y contactos en Dubái nos convierten en un compañero de viaje ideal para estar ardua tarea… Así que, ¿a qué espera para contactarnos?

Si tiene dudas y quiere que le ayudemos con el proceso, por favor escríbanos a [email protected] o mediante el formulario de contacto.


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